Don Enrique José Sanhueza Gajardo pasó gran parte de su vida profesional en los pasillos del Colegio Cordillera.  Llegó junto con los cimientos de nuestro Colegio y sólo partió cuando su labor fue requerida en el Colegio Puente Maipo, de Bajos de Mena.

Tan honrado y agradecido se sintió de contestarnos estas preguntas, que quiso hacerse partícipe de esta pequeña nota también através de un breve saludo para todos los Leones del Cordillera, que encontrarán al final.

Lee aquí la historia de este profesor con corazón de León

1. ¿En qué año llegó al Colegio y qué recuerdos tiene de sus primeros años?

Llegué al colegio Cordillera en el año 1985, año que se fundó..

Los recuerdos que tengo de mis primeros años son la compra del terreno de San Carlos de Apoquindo, en la pre cordillera, lo cual era puro campo que tenían muchos almendros en lomajes.

Recuerdo también un sábado que se realizó una misa inaugural, donde actualmente está el patio de actos, bajo un frondoso sauce. La misa estuvo a cargo de don Francisco Javier Larraín y con todos los directivos, padres, profesores, alumnos y personal administrativo. Fue una mañana hermosa y calurosa a fines de octubre. Al término de la misa, cada familia buscó su lugar bajo los almendros y tuvo su asado para celebrar tan magno acontecimiento.

                 .                       

2. El Cordillera era un colegio bastante nuevo cuando usted llegó. Trabajó en los niveles de alumnos más pequeños. ¿Qué cosas cree usted que se mantienen hasta el día de hoy? y ¿Qué cosas han cambiado mucho?

Hasta el día de hoy se mantienen los mismos objetivos educacionales, espirituales, deportivos y culturales. Específicamente el modo de trabajar, pero con profesores mas jóvenes que asimilaron acertadamente la forma de los mas antiguos. Es decir, el trabajo en grupo enfatizando una sólida formación espiritual, cultural y pedagógica, con lo cual se adquirió una personalidad propia.

E, indudablemente, en lo pedagógico han cambiado las técnicas, con nuevos recursos pedagógicos que han facilitado el aprendizaje.

3. Ud fue profesor por más de 50 años. Después del Cordillera siguió haciendo clases en el Colegio Puente Maipo en Bajos de Mena, de la Fundación Nocedal. ¿Cuales cree usted que son los principales factores que lo llevaron a pasar gran parte de su vida como profesor, en nuestro colegio y después en Puente Maipo?

Los principales factores que intervinieron en mi decisión por dedicar mas de 50 años en esta profesión tan noble que el ser profesor: Lo primero y fundamental es la vocación, el espíritu de servicio, el interés por aprender, ambiente de estudio en el hogar, compañerismo en mi entorno, capacidad de escuchar, respeto por los demás, sentido del humor, creatividad, sacrificio, ser responsable, sincero y algo muy importante es estar dispuesto a enfrentar nuestros miedos. No darme por vencido buscando evidencias de que mis esfuerzos pueden ser éxito.

4. Hoy es cada vez más difícil encontrar buenos profesores para cursos pequeños. ¿Qué recomendación haría usted a profesores que recién se incorporan al Colegio, o ex alumnos qué están pensando dedicar su vida a la pedagogía básica, en un colegio como el Cordillera?

Recomendaría que tuvieran la disposición, interés y proyección para ser educadores competentes y responsables ya que esto los convertirán en millonarios, no en el aspecto monetario, sino en docentes virtuosos.

5. Los niños pequeños son siempre traviesos. Cuéntenos de algunas anécdotas que divertidas o que lo hayan sorprendido, que haya vivido con sus alumnos, que tenga recuerdos hasta el día de hoy.

Primero básico en una sala de clase:  En una clase para reforzar la lectura y escritura, se ideó un juego. El tema era la orientación espacial (arriba, abajo, derecha, izquierda, etc.).
Se nos ocurre con el profesor ayudante, jugar con unos aviones que nos atacaban. El profesor ayudante daba las órdenes y  cada uno tomaba los cañones y apuntaba para derribarlos. El ayudante dando las ordenes en un lugar fijo de la sala: ¡Atentos! ¡Arriba a la derecha! Pum pum pum  ¡Abajo al medio! Pum pum pum -. Mientras que yo me paseaba por delante de la última fila para observar como lo hacían los alumnos. De repente, un niño me dice, ¡Señor!, ¡Señor! ¿Puede correrse un poquito? ¡Que no alcanzo a ver los aviones!

Segundo básico, en el subterráneo, sala de profesores: Todos los años se vacunan a los mas pequeños. Se produce una alarma por temor al pinchazo en algunos alumnos. Uno de ellos pregunta. ¿Señor, duele? Y el profesor responde: Si, no les miento. ¡Duele! Contra pregunta el profesor: ¿Quieres un pinchazo o veinte? Responden los alumnos: 1 ¡por supuesto! Profesor: ¡excelente! Por que si no se vacunan se enfermarán y tendrán que pincharlos 20 veces.

Clase de religión 1ero Básico:  Al final de la clase, antes de salir a recreo, se formaba una fila para dibujar una estrella con la firma del profesor en la libreta de tareas a todos los alumnos que se portaron bien en la clase. Un alumno, que no estaba en la lista de premiados, espero hasta el ultimo a la expectativa que le dieran la estrella. Se acerca a mi y hace el siguiente comentario: ¡Señor, Yo creo que Ud. es el mejor de todos los profesores!  El profesor dice: ¡sonriente, ya pásame tu libreta!
Al día siguiente, el alumno me dice, ¿Se acuerda lo que le dije ayer? Profesor: Si, claro. Alumno: yo le dije, que Ud. era el mejor de mis profesores. Claro que después de mi profesor jefe. ….wawawawa

Cuarto básico: Antes de terminar las clases de la mañana, para ir a almorzar, les dije a los niños: ¡Chiquillos, les cuento, hoy esta de cumpleaños Gerardo! (El auxiliar que hace el aseo de la sala). Los niños me dicen: ¡Ah ya Señor!
Se motivaron y trajeron bebidas, papas fritas, etc. (se adorno la sala)
Fui al lado y le pedí la escoba y la pala a Gerardo, para hacer el aseo de la sala. A demás les dije a los niños, que, si se desocupa mas temprano, podía estar mas temprano con su familia. Cuando estuvo todo listo, lo llame y acudió.
Cuando entraba, le empezamos a contar el cumpleaños Feliz. Se emocionó y casi lloramos con el.
Me parece que ahora está trabajando en portería, de terno y corbata.

6. Cuándo se topa con un ex alumno cordillerano en la calle, ¿Cómo son esos encuentros y qué sensaciones le deja?

Cuando me encuentro con exalumnos me lleno de alegría y emoción, y en mi fuero interno me digo: “misión cumplida”.

Es una satisfacción muy grande y muy grata.